Síguenos

¿Qué estás buscando?

noviembre 21, 2024

Seguridad

Encuentran osamenta en la colonia La Escondida en Cancún

 

CANCÚN.- En un reciente descubrimiento de un cuerpo humano posiblemente de un hombre delgado, en una fosa tipo cenote en los límites entre Cancún e Isla Mujeres ha encendido las alarmas no solo por la gravedad del incidente, sino por lo que podría revelar sobre la situación de inseguridad en la región.

El hallazgo, realizado el domingo 20 de octubre de 2024 por un residente que buscaba leña en la zona, ofrece una perturbadora visión sobre la creciente vulnerabilidad de las áreas periféricas en Cancún.

La colonia La Escondida, localizada en la región 242, se encuentra entre densos terrenos selváticos, un espacio perfecto para ocultar actividades ilegales.

El hecho de que el cuerpo se encontrara en un cenote podría darse a otros crímenes en el sitio.

El lugar resalta una peligrosa tendencia: el uso de estos sitios no solo como fosas clandestinas o panteones ilegales, sino también como lugares para ocultar crímenes.

Este evento no es un caso aislado en Cancún. En los últimos años, la expansión de zonas irregulares y la falta de infraestructura básica han hecho que partes de la periferia se vuelvan vulnerables al crimen organizado.

La región 242, aunque dentro de los límites de la ciudad, es una de las áreas menos desarrolladas y más expuestas a actividades ilícitas.

Advertisement. Scroll to continue reading.
[adsforwp id="243463"]

La presencia de cuerpos en fosas clandestinas no es nueva en Quintana Roo, pero este descubrimiento cerca de áreas turísticas icónicas pone en relieve la necesidad urgente de reforzar la seguridad en la zona continental.

El hecho de que el hallazgo no se reportara de inmediato por cuestiones de la inseguridad por las autoridades.

El vecino que descubrió el cuerpo esperó hasta el lunes 21 de octubre para notificar a las autoridades policiales que después plantea preguntas sobre desconfianzas.

La demora podría explicarse por el miedo a represalias o por la sensación de que las autoridades no actuarán con prontitud.

Esta situación refleja una desconfianza creciente entre los residentes de áreas más vulnerables hacia las instituciones encargadas de su protección.

A medida que las investigaciones continúan, queda por ver si este caso se sumará a la lista de crímenes sin resolver o si logrará desenterrar verdades más profundas sobre la realidad del crimen en las periferias de Cancún.

La Fiscalía General de Quintana Roo tiene el reto de demostrar que puede enfrentar de manera eficiente y transparente este tipo de sucesos,

brindando no solo justicia para la víctima, sino también seguridad para los residentes que viven bajo una constante sensación de vulnerabilidad.

Advertisement. Scroll to continue reading.
[adsforwp id="243463"]

Te puede interesar