Salud.- A cinco años del inicio de la pandemia de covid-19, los efectos secundarios de las vacunas siguen siendo objeto de estudio. Recientemente, se dio a conocer un caso inusual en el que una joven canadiense experimentó un crecimiento drástico en el tamaño de sus senos tras recibir la vacuna Pfizer contra covid-19.
Según un reporte médico, la joven de 19 años pasó de una copa B a una copa triple G en un periodo de seis meses después de recibir las dos dosis de la vacuna. El caso ocurrió en 2022, cuando la joven recibió su primera dosis en septiembre. Pocos días después, comenzó a notar hormigueo y un leve aumento en el tamaño de sus senos.
Al acudir al médico, los especialistas sospecharon que la vacuna podría haber provocado hiperplasia estromal pseudoangiomatosa (PASH), una condición rara que causa un crecimiento excesivo de las células mamarias. Aunque solo ha sido diagnosticada en alrededor de 200 pacientes, la joven fue sometida a diversas pruebas que revelaron ganglios linfáticos inflamados y vasos sanguíneos densos en sus axilas, lo que parece estar relacionado con el agrandamiento del tejido mamario.
A los 11 meses de recibir la vacuna, la joven optó por una reducción mamaria, en la que se extrajeron 3,6 kg de tejido, lo que permitió que sus senos pasaran de una copa triple G a una doble D. Aunque la cirugía corrigió en parte el problema, los senos quedaron asimétricos, y la joven considera someterse a más operaciones para restaurar su tamaño normal.
Aunque este es el primer caso documentado que vincula el PASH con una vacuna, los expertos aseguran que no se puede confirmar que la vacuna sea la causa directa del crecimiento. Sin embargo, continúan las investigaciones sobre este raro efecto adverso.
Aunque no se comprende completamente cómo la vacuna podría haber desencadenado esta reacción, algunos estudios de casos sugieren que las vacunas contra covid-19 pueden provocar una respuesta inmune que genera inflamación temporal de los ganglios linfáticos, lo que a su vez puede hacer que los senos parezcan más grandes. A pesar de estos casos aislados, los especialistas reiteran que las reacciones adversas a las vacunas son sumamente raras y que los beneficios de la inmunización superan los riesgos potenciales.