Daniela Balbuena / Grupo Cantón.
El diseño innovador que ha causado revuelo en la MLB y su impacto en la ofensiva de Nueva York.
Cancún, Q.R.-Durante este fin de semana, los New York Yankees pusieron sobre la mesa un tema que rápidamente se convirtió en tendencia en el mundo del béisbol: los bates torpedo.
Estos novedosos bates, diseñados de manera poco convencional, tienen una zona del barril más extendida y cercana al agarre del bateador, con una parte superior más delgada que los bates tradicionales.
El diseño, que recuerda a un torpedo de guerra, busca mover el punto óptimo de contacto, es decir, el barril del madero, hacia abajo, lo que podría aumentar el rendimiento al golpear la pelota.
El origen de estos bates innovadores se encuentra en el trabajo del físico del Instituto Tecnológico de Massachusetts, Aaron ‘Lenny’ Leanhardt, quien junto con los Yankees, desarrolló un estudio para mejorar el contacto de los bateadores, particularmente de jóvenes como Anthony Volpe.
La idea es ayudar a lograr un contacto más efectivo y consistente con la bola, lo cual podría marcar una diferencia significativa en el rendimiento ofensivo.
Este diseño tomó aún más relevancia el fin de semana pasado, cuando los Yankees, en su serie inaugural de temporada contra los Milwaukee Brewers, despacharon 15 jonrones en tres partidos, incluyendo 9 en un solo juego el sábado, lo que les permitió igualar la marca de los Detroit Tigers de 2006.
Si bien algunos atribuyen la explosión de vuelacercas a los bates torpedo, otros aseguran que este no fue el factor determinante.
Sin embargo, el tema ha sido puesto a debate en la MLB, ya que la reglamentación del béisbol establece que los bates deben ser “un palo redondo y liso, de no más de 2.61 pulgadas de diámetro en su parte más gruesa y no más de 42 pulgadas de largo, siendo de una sola pieza de madera maciza”.
A pesar de la novedad en su diseño, un portavoz de la oficina del Comisionado Rob Manfred aseguró que los bates torpedo son completamente legales y cumplen con las regulaciones vigentes.
Esto abre la puerta a que otros equipos adopten este tipo de bates, ya que se ajustan a las normas de la liga, y podrían convertirse en una nueva tendencia en el béisbol profesional.
